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29 enero 2008


Capítulo 7: Los "sangre cochina" y una voz misteriosa.

Zanky se había pasado los días huyendo del profesor Gilguero, realmente le daban miedo sus abogados, ya habían demandado a medio Hogwarts por plagio al usar frases de sus libros, incluso el profesor Tuno se enfrentaba a un juicio por violar los derechos de autor al haber estornudado parecido al nombre del perro de Gilguero.

Era temprano, muy temprano, pero Wood había levantado a todo el equipo de Quidditch de Hufflepuff para entrenar todo el día. Zanky se vistió deprisa y bajó a desayunar, Ron se quedó dormido con su peluche del oso Yogui.

En el Gran Comedor se encontró con Colina, que estaba con la cámara y un papel en la mano.

- Zanky, Zanky, por favor, una foto, y después me firmas ¿vale? ¿si? ¿eh? ¿si? ¿verdad? por fa.

- Que si, que vale. - Zanky se preguntó para qué querría tanta foto suya.

- Wiiiiii - clic clic clic clic - Gracias Zanky, después iré a verte al Quidditch y te seguiré haciendo fotos, ya verás la pasta... digo, lo contento que se pone mi hermanito pequeño.

Zanky desayunó sin ganas, tenía a Susan al lado hablándole de lo dura que es la calle, lo legal que era ella y lo maravilloso que era su barrio.

- Entonces voy y le digo, le digo, oyes, a la Susan más respeto ¿entiendes? que te meto dos yoyas y te dejo los dientes de diadema, y así fue como conseguí que aquel pringao me hiciera un regalo para mi cumpleaños, porque la Susan es muy pacífica, pero cuando me buscan me encuentran, ¿entiendes?

Zanky huyó de Susan lo antes que pudo, fue corriendo al estadio de quidditch, pasando cerca de la cabaña de Tita, que parecía que estuviera afilando su plato por los ruidos chirriantes que se oían. Al llegar al estadio y después de pasar por los vestuarios, comenzó el entrenamiento con los mantas de sus compañeros de equipo, uno incluso se quedó dormido en la escoba mientras volaba y se perdió de vista camino al Atlántico.

- Como diría Tita Hagrid: uno menos; venga chicos, tenemos que comenzar el entrenamiento, este año la copa es nuestra si o si, ¿queda claro? - Wood se giró hacia Colina, que estaba haciendo fotos desde las gradas - ¡Eh! tú, esquirola, deja de espiarnos, fotos no, fotos no.

- Que no Wood, que no te enteras, que es una que se ha obsesionado con mi bodi y se pasa el día sacándome fotos - Zanky intentó frenar a Wood, pero el capitán no se dirigia hacia Colina, sino hacia los jugadores del equipo de Slytherin, que acababan de llegar al estadio, Zanky decidió bajar con él.

- ¿Qué hacéis aquí? teníamos el campo reservado para Hufflepuff, no podéis entrenar.

- Perdona pero tener un permiso firmado por el profesor Lucius Malfoy - el capitán de Slytherin entregó a Wood el papel y leyó en voz alta.

- Yo, el excelentísimo y atractivo profesor Malfoy, ordeno al equipo de Hufflepuff que se alejen inmediatamente del estadio de Quidditch para que dejen entrenar al nuevo y asombroso buscador de Slytherin, subiéndole 200 puntos por lo bien que lo hará. - Wood devolvió el papel - ¿y quién es ese nuevo buscador?

De detrás del todo se hizo paso Dracon Malfoy, rodeado de los mamuts de su equipo, parecía pulgarcito.

- TÚ! - gritó Zanky.

- Si, yo - Dracon se puso unas gafas de sol - con mis dos escobas.

- ¿Dos escobas? - preguntó Wood.

- Si - respondió el capitán de Slytherin - órdenes de Lucius Malfoy.

Ron, Jermayoni y Jana llegaron al estadio y se acercaron al grupo.

- ¿Qué hace Dracon aquí?

- Soy el nuevo buscador de Slytherin, ¿pasa algo cabeza hueca?

- No, solo que quizás nos quedemos sin snitchs si las robas en todos en los entrenamientos... - Jermayoni enfadó a Dracon.

- Menos mal que almenos tienes gusto para vestir, sangre chochina - Dracon hizo un gesto muy feo.

- Oi lo que le ha dixo a la Jerma, oi lo que le ha dixo - Jana parecía alterada - ven aquí Jerma de mi vida, no le haga caso, ¡¡¡túpido, má que túpido!!! - Jana abrazó a Jermayoni, que parecía que iba a llorar, pero lo evitaba para proteger su rimel.

- Te vas a arrepentir de lo que acabas de decir - Ron sacó su varita rota y apuntó a Dracón - ¡¡Traga-sapos!!

Un relámpago de luz se dirigió directamente a Ron y aterrizó a los pocos metros. Parecía que iba a vomitar, y escupió un sapo que comenzó a croar.

- Jajajaja, este Weasley nunca hará nada a derechas - los jugadores de Slytherin comenzaron a volar, mientras Zanky, Jana y Jermayoni ayudaron a Ron a llegar hasta la cabaña de Tita.

- Chicos, yo he quedao con la Susan, que me tiene que enseñá a hablá con lo ojo serrao. Luego sus veo, besito. - Jana se alejó hacia el castillo.

Oyeron a Gilguero en casa de Tita, así que decidieron esconderse, a pesar de la negativa de Jermayoni.

- Que no, que no y que no, que no te piendo dar una sickle por esta receta.

- Pero sale en mi libro.

- ¡Qué va a salir en tu libro si venía con la guía de la Magimix!

- Bueno, ya te enviaremos un loro con la multa por violar mis derechos de autor. Tropa, seguidme.

Lojar salió por la puerta seguido de tres de sus abogados, mientras Tita los observaba por la puerta, cuando estuvieron lo suficientemente lejos grito "¡So petardo!" y sacó la lengua mientras apuntaba con el plato, pero se giró y vio a los tres amigos.

- ¡Oh!, Zanky, Ron, niña, ¿qué tal? - Tita volvió a guardarse su plato en el cinto. - ¿qué te pasa Ron?

- Su varita, que no funciona y está vomitando sapos.

- Tita, de verdad, por favor, o sea, que tienes el plato, el místico plato, un objeto que combina con todo y lo combinas con... ese.... y esa.... ¿blusa?, un poquito de más estilo Tita, o sea, de verdad, aunque sea por el plato. - Jermayoni ayudó a Zanky a meter a Ron en casa de Tita.

- ¡¡Ahora Fifí, ahora!! escúpela. - Tita ordenó a Fifí, pero la llama ni se movió, ponía cara de mal genio a Ron, y le escupió.

- Jua-zú

- ¡¡FIFí!! A Ron no, a la otra.

En ese momento Ron tenía una arcada y escupió el sapo en la cara de Fifi. La llama tenía las retinas fijas en Ron, y su nariz comenzó a hincharse.

- Juaaaaaaaaaaaaa

- No Fifí no

- zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu zu - la llama parecía una metralleta escupiendo a Ron, que intentaba taparse pero no lo lograba, fue Tita quien logró sacar a Fifí de la cabaña, y mientras Tita estaba fuera pusieron un barreño para que Ron siguiera escupiendo sapos, Jermayoni se sentó en el sofá después de poner un pañuelo en el asiento y Zanky abrió una puerta, buscando el retrete, pero encontró una habitación distinta. En el suelo habían restos de fotografías rajadas, fotografías de Jermayoni cortadas en mil trozos. Habían muñecos de paja con la cara de Jermayoni, despedazados, incluso una diana con una foto de Jermayoni. Tita entró en la cabaña de nuevo y cerró la puerta que había abierto Zanky, para que nadie más pudiera verla.

- Esto... no pienses mal Zanky, es mi sala de entrenamiento, he estado practicando puntería con el plato y... bueno, además descargaba adrenalina... hasta estoy a dieta, si, como lo oís, estoy matando mis ansias de comer con estos chicles.

- Ya era hora Tita, por favor, me daba miedo ver tanta molla - Jermayoni hablaba mientras se miraba las uñas.

- ¿Qué significa "sangre cochina"? - preguntó al fin Zanky.

- Significa que tu sangre no es mágica, que tus padres son muggles, como los míos. - Jermayoni parecía triste.

- Además es un termino muy feo, es un insulto muy grave Zanky, a ver si te voy a tener que labar la boca con jabón. - Tita continuó la explicación - resulta que algunos magos se creen superiores por ser de sangre pura, pero el caso es que no hay ningún hechizo que un mago hijo de muggles no sepa hacer.

Jermayoni se levantó para abrazar a Tita, pero ésta la empujó con la mano sin mirarla.

- Quita niña.

Tita se giró hacia la ventana.

- Ups, tenéis que iros, tengo que ayudar a Luna Lovegood a abonar las calabazas gigantes de la huerta, esa niña sigue empeñada en que los nargles están escondidos por ahí, pero es tan mona...

- ¿Nargles?

- Si, unas criaturas que no existen, esa niñita tiene mucha imaginación. - Tita salió a recibir a Luna. - ¿Dónde está mi Lunita? Pero si está aquí!!, venga, vamos a por los nargles? dame la manita, a ver si hay suerte y encontramos un buen puñado.

[...]

A la hora de la cena el profesor Turno se les acercó.

- Zanky, esta noches tendrás que ir al despacho del profesor Lojar a cumplir tu castigo por los desperfectos del Melocotonero Boxeador, resulta que al pobre árbol le ha dado estrés y está floreciendo antes de tiempo, lo que significa que tendrá más melocotones - el profesor se giró hacia Ron - y tú Ron cumplirás el castigo limpiando la lorería.

Ron palideció, Zanky palideció.

- Tranquilos, no será nada grave, y si lo es decídmelo, que la Susan se encarga, que tengo contactos entre los mafiosos de la escuela, ¿entiendes? - Susan hizo un saludito a su novio de Slytherin, y éste le guiñó un ojo mientras ponía cara seria al hablar con Fred.

- Sí te entiendo. - Ron arriesgó demasiado.

- ¿Cómo has dicho? - Susan espachufló una lata de Cola Cola con su puño - que yo soy muy pacífica, pero si te pasas un pelo conmigo la hemos liado, ¿entiendes?

- Sí, si, lo siento, Susan.

- Así me gusta.

Al acabar de cenar Ron se dirigió temeroso hacia el cuarto donde dormían los loros, para limpiarlo y cumplir su castigo. Zanky siguió por el pasillo y, antes de entrar en el despacho de Gilgueró oyó a Ron suplicar a lo lejos.

- Vaya, vaya, si es el señor Potter, bien, siéntate ahí, esta pila de formularios esperan que los rellenes, en ese cuaderno encontrarás los datos de todos los demandados, quiero que completes los formularios y los metas en sobres. Estos copiotas no se van a salir con la suya, todos demandados, robarme frases a mí...

Zanky se pasó cuatro horas rellenando datos de personas a las que los abogados de Gilguero habían demandado por violar sus derechos de autor y su copiright. Estaba cansado, pero oyó una voz extraña.

- Ven aquí bomboncito, mmm, si, necesito un machote para comérmelo...

Zanky miró extrañado al profesor.

- ¿Cómo dice?

- ¿Cómo digo el qué? - Lojar miró extrañado a Zanky.

- Nada, nada...

- Ven aquí, Romeo, oh Romeo, amorcito, te espero, no te escondas, te quiero mucho...

- ¿Romeo? - dijo Zanky.

- No, Gilguero, soy Gilguero. Oi, qué mal te afecta el sueño, anda criatura, vete a dormir antes de que me confundas con Tita, buen trabajo, mañana mi cuenta bancaria tendrá más galeones para mí.

Al salir del despacho de Gilguero Zanky fue corriendo hacia la enfermería, sabía que Ron estaría allí, y, efectivamente, estaba vendado de pies a cabeza, así que le ayudó a llegar hasta la sala común de Hufflepuff. En el camino fue contándole todo lo que había oído y el miedo que había pasado, pero Ron sólo se limitó a decir:
- Mh grejjkts jrrg

6 comentarios.

  1. Unknown says:

    He de reconocerlo, en este capítulo me lo pasé genial con Ron, jijijiji.

  2. xDDD Me encantó Fifi! No se que tendrá en contra del pobre de Ron para ametrallarlo de esa manera xD
    ¡La habitación de tita! ¡Pobre Jerma! Jajaja!!
    Y esa voz!!! xD Sea lo que sea, de seguro es hembra jajaja!

    BeSiToS…!

  3. Anónimo dice:

    Me encanta Fifí y el vudú de Tita a Jermayoni. Se ve que la encuesta sobre con quien queremos que luche Tita empieza a hacer efecto. Tal vez un pase de modelitos y peinaditos en la suit sería genial. También lo del machote y el Romeo ha estado bien. Yo habría puesto que a Ron le entró diarrea en vez de escupir sapos. hahahaha

  4. Anónimo dice:

    Jajajajajaja Por cierto, cuidado Zanca y Tita, que a veces se os olvida cambiar "lechuza" por "loro", hay una mención en ete cap. que dice que se enviarán lechuzas (lo dice Lojar en la casa de Tita).

    Besos!

  5. Bettynet dice:

    Me ha encantado :) Me he reido un montón cuando han entrado a casa de Tita, con fifí y el cuarto de entrenamiento. Me da penita Jerma, no veas si tita le da caña... jajajaa.

    Me intriga mucho la voz ;)

  6. Anónimo dice:

    Está tremendamente claro qué bicho con nombre de religiosa emite la voz. También parace muy claro qué maquinaciones oscuras, placenteras y penetrantes se realizan dentro del Misterio de la Siut, aunque no sea tan ... placenteras para el pobre macho. ¿Será Zanky el nuevo macho presa de la religiosa?

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