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22 noviembre 2009

Capítulo 23: El Baile de Navidad

Ya estaban en las vacaciones de navidad cuando Tita se acercó a Zanky furtivamente por uno de los pasillos.

- Ai Zanky, ¡¡¡¡¡AI LO QUE HE HECHO!!!!!

- ¿Qué pasa Tita? ¿No me digas que te han salido mal las galletas?

- Baja a la realidad, bonito. No, es que... ains, a ver como te digo que tu pareja es Jana...

- ¿Jana?

- ¿Cómo lo sabes? ¿Tanto se me nota? Si ya me lo decía mi madre, que mi cara me relata...

- ¿Iré con Jana al baile?

- Si, LO SIENTOOOOO, me tentó, como la manzana a Eva, que por cierto, cómo se nota que entonces no había chocolate, a ver hoy en día quién se tienta con una manzana. Estoy escribiendo un ensayo sobre que Eva estaba a dieta, a ver si me lo publican... Fifí opina igual... Ai, que me salgo del tema, AI LO QUE HE HECHOOOOO.

- Pos vale, por mí... psss, mientras lleve pestiños...

Zanky siguió caminando por el pasillo, dejando a Tita sola, que lo miraba con cara misteriosa...

- Aprovecha ahora que puedes, Jana, aprovecha... porque después será demasiado tarde... mmmmuajaja... muaaaajajaja, ¡¡¡MUAAAJAJAJAJA!!! ¡¡¡¡BUAAAAAJAJAJAJA!!!! cof cof cof, leñe, cof cof cof, Fifí cof cof, FIFÍIII cof cof, ¡¡Código morado!! cof cof, ¡¡¡¡que m'ahogoooo!!!! cof cof cof.

Jana fue corriendo por detrás y le dio unas palmadas a Tita.

- Ai xiquilla, ¡¡que te m'ahoga viva!! a vé si maticamo mejó, que un día nos va a dá un disgusto... po sierto, t'acabo de sarvá la vía, que conste ¿ein?

- ¿Salvar la vida? ¡¡¡Lo que has hecho es pegarme por la espalda!!! serás cobarde... a una mujer indefensa como yo darle una paliza por la espalda, ¡¡¡seguro que me has dejado marca!!! anda.... corre, corre que como me dé por sacar el plato te dejo.... ¿Jana? collins, es mencionar el plato y desaparecer... bueno... -dijo, en voz misteriosa- quizás no acabe con ella después del todo... puede que lleguemos a entendernos algún día, en cuanto aprenda a hablar.

- SANKYYYY, ¡¡¡PÉRAMEEEE!!! ¡¡¡QUE TE QUIERO CONTÁ CÓMO HE SARVAO A TITA LA VÍA!!!

- ¡¡¡SERÁ!!!

Tenían un montón de deberes, pero nadie los hacía. En la sala común todos estaban entusiasmados por el inminente baile, por lo que se veía el disfraz de Mortadelo había arrasado entre las chicas. La Susan estaba tumbada ocupando tres sillones, limándose las uñas con su navaja. Zanky se le acercó.

- Hola Susan, ¿con quien irás al baile?

La Susan lo miró de refilón y siguió centrándose en sus uñas.

- Con mi novio, el Corleone. Voy a ir disfrazada de vampiresa, a quien vea con mi disfraz repetido le rajo el cuello ¿entiendes?

- No, si yo voy de magdalena de chocolate gigante... ejem... y... no sé, cuéntame...

- ¿Que te cuente qué? - la Susan se estaba empezando a impancientar.

- No sé... -dijo Zanky, consciente de las consecuencias de aburrir a la Susan - ¿Qué tal con las cocinas?

- Bien, ya es nuestra, eso si, hemos perdido a 13 de nuestros miembros y una nuclear, pero esos raquíticos elfos vuelven a ser nuestros esclavos, y rescatamos a Jana, que estaba atrapada entre dos mesas sin poder moverse ¿entiendes? Nadie rapta a la Jana en mi presencia.

- No sabía que fuera tan amiga tuya...

- Y no lo es, es solo que ella se gasta sus pelas en chocolate de la mafia, ¿entiendes? nos forramos con ella... bueno, y con el rico, tenemos a dos miembros todo el día detrás de él, su misión es llenar los sacos con galeones.

La Susan había dejado de hablar y lo miraba con los ojos entornados.

- Vale, vale, ya me voy, no tengo micro ni nada ¿eh?

- Tranquilo, Zanky, hay confianza, no te voy a pedir que te desnudes para ver si lo llevas, pero deja que mis hombres te cacheen un poco.

La Susan hizo un chasquido y dos miembros de la mafia se acercaron a Zanky registrándolo por encima de la ropa, no encontraron nada.

Llegó el día de Navidad y Zanky se despertó con un fuerte golpe en la cabeza. El Dobby estaba encima de él, en actitud agresiva.

- El Dobby se va a vengar del Zanky, nen... hoy será tu último día de libertad, nen.

El elfo, vestido con su característica chupa negra y con los tres pelos engominados, lanzó a Zanky un collar de oro.

- ¡Anda! Gracias, qué majo...

- Ahora eres libreeeee, muajajaja, nen, ¡¡¡ahora eres libre como yo!!! ahora sabrás lo dura que es la vida sin un pringao...

- ¿Es de oro puro?

- Sí, la mafia me lo ha conseguido a cambio de mi alma, nen, pero vale la pena por ver tu cara de horror.

- ¡Qué way!

- Seee.... me gusta ver como sufres, Zanky Potter, nen, no sabes cuánto llevo soñando con este momento...

- ¡Ei Ron! ¡¡¡Mira lo que me ha regalado El Dobby!!!

- ¡¡Ala!! ¡¡¡qué pasada!!!

- Sí, si, pide ayuda, nen, el Dobby es maloooo, ¡¡¡el Dobby te ha liberado con un collar!!! ¡¡¡¡sufre maldito!!!!

Después de aquella sorpresa abrieron sus demás regalos. Zanky tenía, como siempre, una empanada en forma de arbol de navidad... más o menos... de parte de Tita Hagrid. Una crema de labios hidratante con microagentes de diamante de Jermayoni, unas morcillas de pueblo de Enrique Alfarero, una mariposa en un bote de Luna (jamás le diría que apareció muerta por asfixia), un bote enorme de helado de chocolate con anisetes de Jana, un vale descuento por un asesinato de la Susan (quizás lo use...) y un peluche usado de Ron.

- ¿Te ha gustado mi peluche?

- Sí, Ron...

- No lo dices muy convencido...

- Ron, tu peluche es el mejor regalo de todos - contestó Zanky, casi parafraseando.

- ¡Qué ilusión! gracias por tu poni invisible, luego le daré de comer un poco de aire...

- No necesita muchos cuidados, Ron... por cierto, ¿y ese paquete?

- Mi disfraz para la fiesta.

- ¿Y qué es?

- De princesa, me lo ha mandado mi madre, mira, es rosa... no sé, tengo la ligera sospecha de que mi madre piensa que soy una chica...

Al bajar a la sala común todos estaban muy emocionados. Se cruzaron de golpe con Jermayoni, que llegaba con la boca llena y masticando.

- ¡Paso, paso! ¡¡Que tengo que prepararme para el baile!!

- ¡Pero si aún faltan 10 horas!

- ¿Sólo? Oh Dios Mío, creo que se me ha parado el reloj. ¡Maldita sea la hora en que la Hilton sacó su línea de relojes! Qué estrés, qué estrés, esto no puede ser bueno para la piel, me van a salir arrugas como las de Tita, que en paz descanse...

- ¿Qué le ha pasado a Tita?

- ¿No lo sabéis? Jana dice que la mató ayer de un golpe, la dejó KO... en fin, yo de Jana no me fio, será muy amiga mía, pero es que me cuesta entenderla a veces... anda, haced el favor y ayudadla a entrar por el retrato, que se ha quedado atascada... a ver qué le hago para que quepa en su disfraz y que además parezca más delgada... ¡Jana tía! o sea, ¡pero suelta ese muslo de avestruz! ¡Merlín! qué paciencia, y yo con estos pelos aún...

- ¿Con quien vas al baile, Jerma? - preguntó Ron por enésima vez.

- Con tu... mira Ron, no me hagas ser soez por favor te lo pido, que estoy mu estresada y con el baile a la vuelta de la esquina.

- ¡Que faltan 10 horas!

"Plas plas"

- QUE YA LO SÉEEE, NO ME METAS MÁS PRISAAAAAAAAS.

Y así, histérica, Jermayoni subió al baño de las chicas a ponerse mona.

Zanky y Ron fueron a los jardines y vieron a lo lejos la cabaña de Tita Hagrid, con algunos mechones de diferentes colores decorando su puerta. Dentro se oía un gran jaleo.

- ¡¡¡QUE TE HE DICHO QUE NO Y ES QUE NO!!! ¡¡HOMBRE YA!!

- Vaya -dijo Ron- no había muerto.

Tita salió de su cabaña, con un peine pegado al pelo mojado.

- ¡¡¡AI ZANKY!!! Gracias a Merlín, ¡¡¡tienes que ayudarme!!! ¡¡MIRA!! ¡¡Mira lo que me ha hecho la Madame Cursí!!! Una que se quería poner mona para el baile, he intentado ponerme un poco de laca y mira... ¡la muy arpía me ha cambiado el bote por uno de pegamento y se me ha pegado al pelo! La muy salvaje...

- Por cierto Tita, ¿dónde está la carroza de oro de las de Beauxbatons?

- Ammm... nada... sin querer tropecé con el carro y claro, no tenían puesto el freno de mano y... bueno, acabó en el fondo del lago con el calamar gigante. ¡Pero oye! que fue un accidente, no un ataque gratuíto como este del pegamento. ¡A ver qué hago ahora! Y no pienso usar el plato para cortarme mi pelo. ¡Faltaría más!

- ¿A quién gritabas?

- A Fifí, que se ha empeñado en ir disfrazada de pitufa. ¡DE PITUFA! porque he llegado a tiempo, pero ya se ha teñido las patas de azul la muy.... está de un rebelde la cría que... cualquier día mira, la dejo en una gasolinera y... y... Ai no, mi Fifí, con lo que yo la quiero. ¡¡¡¡Ven aquí Fifí, dame un abrazo!!!!

Tita volvió corriendo a su cabaña dejando a los dos chicos alucinados.

Todos estaban muy nerviosos, y Zanky se estaba comenzando a poner también cuando vio que el disfraz no era comestible. Se puso frente al espejo de su habitación y se miró.

- Estoy bueno ¿verdad?

- Te comería entero -dijo Ron.

- Ui, malo... si tu me comerías Jana me comerá fijo... por cierto Ron, ¿tu traje de princesa es de tu talla?

- Claro, la 90 60 90...

- Ah, vale, vale... pues ponte unos calcetines en el escote o algo digo yo.

- ¿Qué dices? ¿estás diciendo que tengo los pechos pequeños? ¿es eso? snif, snif.

Ron se puso a llorar mientras se ponía el colorete y la purpurina dorada por el pelo. Ernie estaba al otro lado, con su disfraz de almohada.

- ¡Qué original, Ernie! ¿Lo ha hecho tu abuela?

- No, que va, ella me hizo un disfraz de Hulk, pero es que se me ha olvidado donde lo puse... así que uso la almohada...

Al bajar a la sala común no encontraron a Jana ni Jermayoni, el baño de las chicas seguía cerrado y con luz dentro, debían estar retocándose, así que bajaron al vestíbulo con el resto de asistentes.

Allí todas las alumnas de Beauxbatons estaban mojadas, pero con sus vestidos de ángeles. Su directora vestía un disfraz de una diosa griega, con todo de oro, su pareja era Albus Dumbledore, que vestía un disfraz de cupido, con sus flechas de amor, su pañal y sus alitas.

- Dumbledore, tápese un poco por el bien de los niños... -decía Tita que acababa de llegar de la mano de Cascao, disfrazado de Lobezco, con el torso al aire.

Ella iba vestida de tigresa, o eso parecía, llevaba un traje de los colores, ajustado y provocativo, y un peine pegado al pelo.

- ¿A que no se me nota el peine, Zanky?

- No, qué va... lo has disimulado muy bien... -mintió Zanky.

La gala estaba a punto de comenzar. Un grupo de fotógrafos se reunía a la puertas del Gran Comedor, por donde iban pasando los alumnos disfrazados. Zanky vio a Luna, vestida de mariposa, con Ernie, de almohada. Enrique también iba al baile, con Fifí, que finalmente escogió un disfraz de jirafa algo improvisado por Tita... Zanky también vio al canguro de Cascao, disfrazado de conejo gigante de color negro, y OjoChungo vestía un ridículo traje de preso... parecía muy real.

Llegó el momento, los cuatro pringaos debían acceder a la sala con sus parejas. Zanky estaba solo, pero no había problema porque Krum, disfrazado de Capitán América, también lo estaba. Los primeros en entrar y posar para las cámaras fueron Fleuggg Delacour y su pareja, el chico rico de Hufflepuff... Zanky pensó que quizás había algo de interés... porque se llevaban lo menos 6 años. Después posaron Cedric Diggory, vestido de súperman, con su pareja.

Se oyó un gran jaleo por las escaleras.

- Jo tía, ¡¡no me pises!! o sea, ¡¡¡que llegamos tarde!!!

- Xiquilla no soy yo, ej que han estrexao lo pasillo o argo, porque ante pasabamo mu bien la dos juntas...

Al llegar al último escalón se pusieron serias. Jana iba vestida de novia, con un GRAN traje blanco, enseñando escote, y un velo que le llegaba hasta la cola del vestido, tres pisos arriba. La otra chica parecía Jermayoni... quizás ella estuviera debajo de la capa de yeso que cubría su cara, porque eso difícilmente podría considerarse maquillaje. Eso sí, estaba muy guapa.

- Lo siento Krumi, es que apenas he tenido tiempo para arreglar, ¡buff! ya ves cómo vengo, a medio arreglar, qué poca clase la mía...

- Po yo también...

Zanky y Jana entraron de la mano al Gran Comedor, tuvieron que posar durante unos minutos para la prensa y finalmente entraron. Al posar Krum con Jermayoni comenzaron los rumores entre los asistentes.

- Ui, ¿no es esa Jermayoni? - preguntó Marta Treces, disfrazada de payasa.

- No, no creo vamos... - respondía Ron.

Cuando empezó el baile y comenzaron a bailar los cuatro pringaos Zanky se sentía nervioso y torpe.

- Jana por díos, ¿no había un vestido menos... ¿largo?

- ¡¡Si é mu bonito!! ¡¡OYEEES!! ¡¡¡NO ME LO PISEI SO DESCONSIDERAOS!!!

- Jana tía, o sea, ¿cómo quieres que bailemos si tu cola del vestido de novia inunda toda la sala?

- Jerma, po poneo a bailá po la esquina, será que hay poca...

- Anda Krumi, no le hagas caso y agárrame bien.

Al terminar el baile Zanky salió corriendo junto a Ron, dejando a Jana discutiendo con varios asistentes que le habían pisado la cola del vestido.

- Zanky, ¿quién es esa chica que va con Krum?

- Es la Jerma, que se ha puesto mona.

- ¿Y va con ese creído? pfff tal para cual.

- ¿No decías que te encantaba Krum?

- Ya no, ea, es un tonto del bote.

En ese momento se acercó Tita por detrás.

- Ai que iluuu, Webo ha ido a por unos chupitos, nos vamos a mover el esqueleto un rato a la pista de baile, ¡¡yujuuu!! y lo mejor, mirad a la Cursí, ahí pringá metiendo mano a ese que... un momento... ¡SO LAGARTIJA! ¡¡QUITA TUS ZARPAS DE MI PAREJA!! Webo, por dios, no te dejes, ¡¡no te dejes!!

Zanky se fijó en que algo gordo estaba pasando en las últimas filas, pertenecientes al sector mafioso. Un gran alboroto, seguido de varios disparos que todos hicieron como que no se habían producido. Finalmente, Corleone salió corriendo de allí con el brazo ensangrentado, y la Susan salió al rato con la cara completamente roja de la rabia y sangre en la boca como si hubiera mordido a alguien... ¡qué disfraz más bien logrado!

Jermayoni se acercó a Zanky y Ron, que estaban sentados en un banco.

- O sea, esto es genial, mi Krumi ha ido a por unas coca colas light con mucha cafeína y... o sea, ¡qué fuerte! ¡¡pero qué fuerte me parece, Ron!! ¡¡Te has copiado mi disfraz!!

- ¡Qué dices! este me lo ha mandado mi madre.

- Pues es idéntico al mío, ¡míranos! oh por dios, qué vergüenza más grande, que nadie nos vea juntos...

En ese momento Krum se acercó y abrazó con sus musculosos brazos a Ron por la escalda.

- Seguimos bailando, ¿cielo?

- V... vale, pero no me hagas daño porfa.

"Plassss"

- Ale, o sea, ahora ya te pondrán diferenciar de mí, tú eres el de la palma marcada en la mejilla derecha. Vamos Kromi, no te juntes con este fulano.

- ¡Fulana tú!

Krum se giró, hizo como que se arremangaba los brazos y se puso en actitud ofensiva.

- ¿Cómo dices, chaval?

- Que... que... no me pegues por favor, ¡¡te lo suplico!! soy muy joven para morir, los médicos me dan solo 3 años de vida, ¡no me mates antes de tiempo!

- Déjalo Krumi, es un tonto laba, vámonos a bailar antes de que Fifí comience a escupirle, no quiero que me salpique.

- JUAAAAAA ZU ZU ZU ZU ZU.

Marta Treces había desaparecido, no se sabe por si vergüenza ajena de Ron o porque había tropezado por algo, pero el caso es que nadie se dio cuenta. Luna estaba dando vueltas y más vueltas, y cuando paraba se tambaleaba de un lado a otro, mareada.

- Mira Zanky, soy mayor, ¡estoy borracha!

- ¡Yo también quiero! - Zanky se puso en pie para imitarla, pero en ese momento apareció Jana.

- ¡Sanky, Sanky! Ven aquí guapo, que nos van a hasé un reportaje fotográfico.

Allí estaba Colina, con su inseparable cámara y una gorra en el suelo.

- Colina, dile a tu hermano que se esconda debajo d'una mesa o argo poque me huelo que lo van a pisá y despué no van a poder despegalo de la suela der sapato...

Colina se puso manos a la obra y comenzó a hacer un reportaje fotográfico de Zanky y Jana, mientras cambiaban de pose.

- Ahora sujétame Sanky, que voy a etirá una piena pa arriba.

"Poom"

- Jo Jana, si es que pesas mucho.

- No pasa nah, no pasa nah, etoy bien... Oi, Colina, lo siento muxo, creo que he pillao a tu hermano, y caro, aunque una tenga er peso d'una pluma er é mu xiquitillo y... ¿cuxa, etá bien? Ai Colina, llevalo a la infermería que coroque no repira, si ej que tengo un cuerpo d''infarto.

Tita apareció de golpe y miró a Jana con asco.

- ¿Qué tal todo por aquí?

- Pues... -comenzó a decir Zanky.

- Divinamente Tita, Sankita y yo ya etamo pensando en casarno, ¿verdá MI Sanky?

- Pues...

- ¿Y tú Tita, xiquilla? no ha comio ná, prueba un poco d'ese pollo, etá riquísmo.

- No, que estoy a dieta.

- ¡Si no engorda ná! ¡que me lo dijo un erfo mu majo de la cosina! anda, prueba er jamón.

- Que te he dicho que no, Jana.

- Si te va a quedá en lo hueso, si te va a quedá anorésica d'esa, anda, para d'hasé la dieta.

- ¡¡Para tú de comer, gorda!! Ala, ya lo he dicho, ¿estarás contenta? yo no te lo quería decir porque cuanto más gorda menos posibilidades tienes con Zanky, ahora ya sólo falta que te pongas a dieta, pero tú tranquila, sigue comiendo como una descosida, algún día te dará un algo y la palmarás en alguna clase, ojalá sea la mía, así te puedo aprovechar para alimentar a mis criaturitas...

Jana quedó algo desconcertada, miró el muslo de cordero que tenía en la mano derecha y parece que entró en razón.

- Po a mí m'está to mu güeno... - y siguió devorando su muslo de cordero mojándolo en la salsa.

- Por cierto, ¿habéis visto a Fifí?

- Sí, está allí, hidratándose junto a Enrique.

Tita miró a Fifí, que ya la estaba mirando a ella desde hacía un rato, y la llama giró repentinamente la cabeza. Estaba claro que estaba hablando a Enrique de Tita, y no muy bien precisamente...

- Oi, oi como esté poniéndome verde delante de Enrique, a esta se le caen las orejas hoy. ¡¡Fifí!! ¡Ven aquí!... ¡Webo! ¡¡quítate a la pija del cuello!! ¡¡Fifí!! ¡¡Weboo!! AIIII QUE ESTRÉEEEES.

Sin pretenderlo, Tita sacó el plato y lo lanzó al aire. Inmediatamente todo el Gran Comedor se echó al suelo. Tita recogió su plato, ya menos estresada, y salió disparada detrás de Fifí y Madame Maxime.

- Xiquillos, ¿no hay otro sitio pa tumbarse que no sea mi cola der vestío? Hombre, un poquito de pofavó, mirá como me lo etai poniendo, ¡¡que era blanco!!

Zanky logró escabullirse y salió a los jardines, donde algunas parejas ya estaban dándose el lote.

- ¡Iros a un motel! so pervertidos.

- Di queu si, miralous, todos haciendo una orgíau aquí fuera como conejous... la Nancy ya va por su tercer lote de la nocheu...

La mormona regresó al castillo, disfrazada con un burka y con arcadas.

Zanky no quería correr la misma suerte que ella, así que se tapó los ojos hasta que se alejó un poco de la zona de los cochinos morrenos. De pronto oyó un ruido seco y fuerte, Zanky se ocultó detrás de unos matorrales a observar.

- Será bestia el canguro... cómo me ha dejado el ojo, ahora no podré guiñárselo a Charlie...

Dumbledore salía con un ojo hinchado y morado, con su vestido de cupido. Zanky se asomó y vio a Rambo, el canguro de Webo con sus guantes de boxeo. Estaba junto a Lucius Malfoy, que iba disfrazado de rey con corona de oro. En ese momento el canguro comenzó a rascarse un brazo y algo cobró forma en él. Lucius se lo tapó y se lo llevó a otro lugar más oscuro. ¿Qué ocultaban?

- Pues yo soy de un pueblecito de la Galia...

Era la voz de Tita, venía de una pequeña fuente artificial. Zanky se acercó y vio a Fifí encerrada en la cabaña de Tita, aparentemente enfadada. Pero Tita estaba sentada tomando el fresco junto a Webo.

- Mi madre y toda su familia es gala. De mi padre no sé nada, las galas es que son muy suyas, no admitimos hombres en nuestros poblados. ¿Tú eres galo?

- No, yo soy americano.

- ¿Y allí hay galos?

- Pues no, pero hay indios.

- ¿Eres indio?

- No, soy americano.

- Ah... entiendo... ¿un morreo?

Zanky prefirió no quedarse más allí, se apartó una mosca cojonera que tenía en la frente y regresó al castillo, tropezando con algunas parejas que se estaban dando el lote en la entrada. Zanky pasó un rato paseando sin más. No quería regresar al Gran Comedor porque estaba Jana, lo sabía porque se veía su enorme cola del vestido por todo el suelo de la sala.

Al rato se le acercó Cedric.

- Zanky, tú me ayudaste con la anterior prueba, así que te daré una pista para abrir la bellota...

- ¡Otras! La bellota... a saber dónde la tengo...

- Bueno, escucha, tú ve al baño del cuarto piso, el de prefectos, la contraseña es "Ai omá qué rico está Albus". Pero es mejor que vayas de noche, así nadie te verá. El caso es que... te des un baño y te relajes.

Cedric le guiñó un ojo y se fue por donde había venido. Zanky en cambio se quedó muy sorprendido.

- ¡Será pervertido!

Desde ese momento Zanky no vería con los mismos ojos a Cedric.

Un gran revuelo se produjo en las escaleras, allí estaba la Susan, con una ametralladora.

- ¡¡¿¿DONDE ESTÁ??!! ¿¡¡DÓNDE ESTA QUE LO MATO, LO MATOOOOOOOOOOOOOO!!?

Tita se hizo paso.

- ¿Alguien ha llamado al 911?

Varios alumnos señalaron a la Susan y Tita se la acercó.

- Ains... ¿qué pasa Susan? ¿Se te ha roto la pistolita de agua? deja, ya te la arreglo...

"Pum pum prurururururum!"

- ¡Anda! ¡si es de traca! qué moderneces hacen hoy en día.

- No, Tita, Corleone me ha engañado con una ocupa de Beauxbatons.

Las palabras de la Susan estaban tan cargadas de odio que todos los de alrededor dieron un paso atrás, por precaución.

- ¡No puede ser! - se sorprendió Tita- Ahora mismo vamos a cantarle a ese chico las cuarenta, ¡hombre ya! dejar a mi Susan, con lo buena que es... vamos, angelico, vamos...

Zanky no quiso meterse más en el asunto porque fijo que no acababa demasiado bien... no le gustaría estar en el pellejo del Corleone. Bajó a la sala común y allí se encontró a Ron y Jermayoni discutiendo.

- ¡¡¡Pos yo iba más guapo que tú!!!

- Que te crees tu eso, ¡osea! es que eres de lo peor, no te escupo porque soy una señorita y Fifí ya se encarga de eso, sino...

- Sino qué ¿eh? ¡so tonta del bote!

"Plas plas plas"

- ¡Reza porque no me haya roto una uña! - Jermayoni se puso a revisar sus uñas después de dar un aplauso a la cara de Ron.

- Ese Krum es una mala influencia, ¡¡¡quiere aprovecharse de ti!!! además es el enemigo, ¡¡quiere matar a Zanky!!

- ¿Pero tú estás tonto o estás tonto? mira, niño, primero... ¡¡¡¡¡MI UÑA!!!!! NOOOO, ¡¡¡¡la buena!!!!

"Plas plas plas plas"

- Digo... primero, Krumi no es el enemigo aquí, esto del Torneo es para fomentar la amistad... bueno, entre otras cosas, porque no sabes como besa el Krum... bufff... y segundo, ya sabes cuál es la solución para que esto no vuelva a pasar.

- ¿Ah si? ¿cual?

- ¡Ponerte cachas para invitarme a mí al baile antes que otro! O sea, de verdad, qué sofocón, voy a quitarme el maquillaje ya, a ver dónde he dejado la espátula hormigonera...

A través de las ventanas que daban al gran lago se oyó un gran ruido de disparos y Tita gritando algo, después se hizo el silencio y todos en la sala común vieron una enorme bolsa negra cayendo al fondo del lago, donde el calamar gigante le daría buen provecho.

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